Lo dice orgullosa Aldana Ciceri, una de las alumnas de los cursos gratuitos que ofrecen los Centros de Formación Profesional de la Ciudad de Buenos Aires. Ella, como Viviana Pedro, quiere ser cocinera profesional. Pero hay otras opciones para capacitarse: construcción, mecánica del automotor, diseño gráfico y electricidad.
Aldana Ciceri y Viviana Pedro, pese a no ser de la misma generación, comparten el sueño de pelearle a la vida desde “el esfuerzo”. Quieren crecer, estudiar, encontrar herramientas como ellas mismas repiten para hacerle frente al futuro propio y de los suyos. Son dos buenos ejemplos, entre tantos, de las 60 mil personas que se capacitan en los Centros de Formación Profesional, desde el Ministerio de Educación. Ellas eligieron gastronomía, pero muchos otros se inclinan por la construcción, la mecánica del automotor, el diseño gráfico, la electricidad, el trabajo textil e indumentaria.
“Posibilidad de crecimiento”, es la frase que comparte la mayoría. La repiten Aldana y Viviana, mientras aprenden los secretos de las ollas y los sartenes en el Curso de Cocina que se dicta en el centro de Formación Número 4, de Mataderos.
Dice Aldana Ciceri: “En la secundaria vos tenés que ir orientada a algo. Yo no sabía a qué. Al principio vine como un pasatiempo, pero ahora estoy a una altura del año en la que quiero seguir. Sí o sí. Tengo claro que quiero ser cocinera o chef. Hay gente que no sabe de esto, no sabe qué existen cursos gratuitos de gastronomía porque todos sabemos que estudiar gastronomía es caro. Acá te anotas y es gratis, solamente tenés que traer tus cosas para cocinar, porque incluso la materia prima es gratis. Pero lo importante es que la enseñanza es gratis y eso es lo que vale. Me parece buenísimo. Sin educación no tenés trabajo. Yo estoy haciendo la secundaria y a la vez este curso, para el día de mañana tener algo con qué defenderme.”
Y dice Viviana Pedro: “Se me dio ahora la posibilidad de hacer los cursos porque dejé de trabajar y para el día de mañana tener mi propio emprendimiento. El lugar está bueno y la gente con la que compartís el día a día también es muy buena. Mi posibilidad no era hacer un curso pago y acá tengo la posibilidad de hacerlo.”
Dos vidas, dos mundos. Y un objetivo común: aprender y progresar.
